La semana pasada tuvimos la oportunidad de hacer un recorrido muy completo por nuestra ciudad Medellín (La imagen describe lo que fuel el recorrido) y también tuvimos la disposición de dos guías quienes nos ilustraron sobre datos y lugares que no conocíamos completamente.
El recorrido inicio a la salida del colegio y desde ahí nos dirigimos a la estación del metro de la Aguacatala donde abordamos y cruzamos la ciudad en sentido nororiental hasta la estación Acevedo donde nos bajamos del metro para abordar el metrocable, el cual usamos para ir a visitar la Biblioteca España, una obra que donaron los reyes de España para ayudar al progreso de una zona tan marginada como esta. Tanto la biblioteca como los dos metrocables son obras de acción social; estas facilitan la vida de las personas que viven en estas zonas y tienen grandes dificultades para conseguir transporte y educación que son las facilidades que estas obras brindan. De estas tres la obra que me parece trae grandes beneficios en especial a la situación social es la biblioteca, ya que ayuda a los jóvenes a alejarse de la violencia y a crear un mayor interés por el estudio, me parece que es una posibilidad para un mayor progreso para los jóvenes de estas zonas.
La biblioteca España está ubicada en uno de los cerros tutelares de Medellín, el cerro Santo Domingo, el cual es un ejemplo a seguir por su gran cambio en la última década. La población de esta zona a sufrido una gran transformación y se podría decir que el cerro paso del miedo a la esperanza gracias a los proyectos de acción social que han impulsado la conciencia social y han mejorado la calidad de vida de quienes habitan en el lugar. En Medellin hay siete cerros tutelares pero los más destacados son, el cerro Santo Domingo, el Nutibara, el Picacho y el Volador.
El Nutibara es el cerro que representa nuestra cultura y nuestros orígenes, en el está ubicado el pueblito paisa que es una réplica de un pueblo antioqueño tradicional. El cerro Picacho es de representación religiosa, en el está ubicado el Cristo Rey una imagen que desde hace más de tres décadas es visitada y adorada por propios y extraños para recibir favores y milagros, por último, el cerro volador es también cultural pero este es más representativo a nuestra historia nativa, es la Cuna de Pobladores Indígenas de Medellín, pues allí donde los aborígenes establecieron inicialmente sus primeras colonias.
La biblioteca España junto con el metrocable de San Javier fueron los dos lugares que más me impactaron ya que son como imágenes del antes y el después. Yo entiendo que el trabajo en el cerro San Antonio está lejos de ser terminado pero el progreso y la mejoría son evidentes. Es muy alentador ver como una comunidad con el apoyo apropiado puede demostrar que puede salir adelante; la otra cara de la moneda es La Aurora que es una zona donde la ayuda es bien recibida y hacia mucha falta, pero donde queda demasiado por hacer. De todas formas proyectos como el de los juegos suramericanos son promesas de un futuro para estas personas.
Esta clase de convocatorias y de obras ayudan a que esta sociedad pueda salir adelante y mejorar en todos los aspectos.Después de terminada nuestra visita a la biblioteca España nos devolvimos en el metrocable y nos dirigimos hacia el Occidente de nuestra ciudad a conocer el otro metrocable siguiendo las normas de cultura metro, como dejar salir para entrar más fácilmente, no recostarse en las puertas y ceder el puesto a quien más lo necesite.
Llegamos al metrocable y subimos observando lo grave de la situación de este sitio, las grandes dificultades con las que la gente debe convivir en su diario vivir en esta zona de la ciudad, fue entonces que en la estación tuvimos la oportunidad de escuchar una charla de una de las personas que hace labores sociales en nombre de la alcaldía en la zona; fue entonces, después de observar las dificultades de estas personas y escuchar los testimonios de este hombre que me di cuenta que en este sitio hay mucho por hacer y que tal vez en un futuro cuando ejerza mi profesión como medico pueda participar en proyectos de acción social en estos sitios brindando mis servicios de una forma gratuita para este tipo de gente que probablemente los necesite a gritos.
El valle en donde se ubica Medellín (el Valle de Aburrá) estaba habitado por pueblos indígenas desde el siglo quinto a. C., aproximadamente; fue visto por los españoles, por primera vez, en agosto de 1541 durante una expedición al mando de Jerónimo Luis Téjelo, quien a su vez obedecía órdenes del Mariscal Jorge Robledo. La ciudad fue objeto de varias fundaciones, la primera de ellas en 1616.Pero más importante que fechas históricas y un tema en el que me quiero enfocar a cabalidad es la superación que ha vivido la ciudad de Medellín a nivel social. Después de 1945, con el comienzo de la época de “La Violencia”, la ciudad afrontó un proceso acelerado de crecimiento que hizo aumentar el número de habitantes y urbanizar terrenos que no eran tenidos como posibles zonas de construcción, especialmente hacia el norte. Si bien la guerra civil que se ensañó con los campos colombianos no tocó directamente a la ciudad, esta sí se vio afectada por la llegada masiva de refugiados.La década de los 70 vio el surgimiento de las mafias colombianas de la droga, lo que influiría en los problemas sociales, políticos y de desarrollo de la ciudad, y que contribuirían a asignarle el mal ganado título de “ciudad más violenta del mundo”. La crisis provocada por la mafia afectaría la vida de la ciudad sobre todo en la década de los 80 debido a la guerra del estado contra la misma, y que tuvo a la ciudad como principal escenario. Pero el desarrollo de las mafias y su presencia en la ciudad obedece a un proceso más complejo que implica situaciones sociales y políticas del momento. El fenómeno del sicariato, por ejemplo, es el encuentro entre una realidad de marginación social y el avance de los negocios ilícitos de las drogas.A principios del siglo XXI la ciudad continuaba recibiendo los efectos negativos de un ilícito pero lucrativo negocio que condujo a una crisis sin precedentes en la historia de la "Tacita de Plata". A partir del 2002, sin embargo, la crisis de las mafias comenzó a enterrarse en el recuerdo, y la ciudad recuperó su estructura económica tradicional. Desde entonces la ciudad ha venido luchando contra esta problemática hasta hoy en día superar esta etapa histórica y ver la ciudad con ojos de emprendimiento y desarrollo. Grandes proyectos y empresas se han apoderado de Medellín y hoy en día la idea de parques, bibliotecas, museos y sitios tanto turísticos como culturales se expande de una manera agresiva y quiere cambiar la cara de Medellín y hacer de nuestra ciudad un lugar que todos quieran visitar.
